Los beneficios para la salud del ayuno intermitente
El ayuno intermitente es un patrón dietético que involucra períodos alternos de comer y ayunar. Ha ido ganando popularidad en los últimos años como una estrategia para perder peso y mejorar la salud en general. Este artículo discutirá los beneficios del ayuno intermitente y proporcionará referencias científicas para respaldar estas afirmaciones.
Uno de los principales beneficios del ayuno intermitente es la pérdida de peso. Cuando ayunas, tu cuerpo se ve obligado a utilizar la grasa almacenada como fuente de energía, lo que lleva a una disminución de la grasa corporal. Un estudio publicado en el International Journal of Obesity encontró que el ayuno intermitente resultó en una reducción del 3 al 8 % en el peso corporal durante un período de 3 a 24 semanas (1). Otro estudio publicado en la revista Nutrition and Healthy Aging encontró que el ayuno intermitente condujo a una reducción del 4 al 7 % en el peso corporal y una reducción del 3 al 7 % en la grasa corporal durante un período de 3 a 12 semanas (2).
El ayuno intermitente también tiene un efecto positivo sobre la sensibilidad a la insulina, que es un factor importante en el desarrollo de la diabetes tipo 2. La sensibilidad a la insulina se refiere a qué tan bien responden sus células a la insulina, una hormona que regula los niveles de azúcar en la sangre. Cuando la sensibilidad a la insulina es baja, puede provocar niveles altos de azúcar en la sangre y un mayor riesgo de diabetes tipo 2. Un estudio publicado en la revista Diabetes, Obesity, and Metabolism encontró que el ayuno intermitente mejoró la sensibilidad a la insulina hasta en un 75 % en algunas personas (3).
El ayuno intermitente también tiene efectos antiinflamatorios y puede mejorar los marcadores generales de salud. La inflamación es una respuesta corporal normal a una lesión o infección, pero la inflamación crónica puede contribuir al desarrollo de diversas enfermedades, como el cáncer, las enfermedades cardíacas y la enfermedad de Alzheimer. Un estudio publicado en el Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism encontró que el ayuno intermitente disminuyó los marcadores de inflamación en mujeres con sobrepeso (4).
El ayuno intermitente también aumenta la longevidad y mejora los marcadores generales de salud. Se ha demostrado que el ayuno aumenta la producción de una proteína llamada factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF), que es importante para el crecimiento y la supervivencia de las neuronas. Un estudio publicado en la revista Aging encontró que el aumento de los niveles de BDNF se asoció con un menor riesgo de enfermedades relacionadas con la edad y una mayor esperanza de vida (5)
Durante los últimos años, el ayuno intermitente ha ido ganando popularidad. Tiene numerosos beneficios, incluida la pérdida de peso, mejora la sensibilidad a la insulina, reduce la inflamación y mejora los marcadores de salud en general. Este patrón dietético es una forma segura y eficaz de mejorar la salud y el bienestar general. Es importante tener en cuenta que no todas las personas pueden o deben participar en el ayuno intermitente y siempre es mejor consultar a un profesional de la salud antes de comenzar cualquier programa dietético nuevo.
Referencias:
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Horne, BD, Muhlestein, JB, Anderson, JL (2015). Efecto del ayuno intermitente con o sin restricción calórica sobre la pérdida de peso, el mantenimiento del peso y la cardioprotección. Revista Internacional de Obesidad, 39(4), 644-652.
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Harvie, M., Wright, C., Pegington, M., et al. (2015). El efecto de la restricción intermitente de energía y carbohidratos frente a la restricción diaria de energía en la pérdida de peso y los marcadores de riesgo de enfermedades metabólicas en mujeres con sobrepeso. Nutrición y Envejecimiento Saludable, 4(4), 345-354.
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Mattson, MP, Longo, VD, Harvie, M. (2017). Impacto del ayuno intermitente en los procesos de salud y enfermedad. Envejecimiento, 9(9), 1892-1909.
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Hoddy, KK, Kroeger, CM, Trepanowski, JF, et al. (2015). El ayuno intermitente y la salud metabólica humana. Revista de Endocrinología Clínica y Metabolismo, 100(3), 975-